En la comarca de Sayago de Zamora, cerca de la provincia de Salamanca, encontramos el pueblo de Fermoselle. Un lugar que destaca por sus paisajes, vistas panorámicas, gastronomía y tradiciones.
En la antigüedad fue un pueblo fortificado de origen prerromano que luego se convirtió en una fortaleza hasta convertirse en un núcleo dedicado a la agricultura. De hecho, su clima prodigioso hace posible la siembra de viñas y la producción de vinos desde hace más de medio siglo.
FERMOSELLE - Pueblos de Zamora. Foto por Antramir. Wikimedia Commons.
Aquí, en Fermoselle comienza la aventura turística que año con año, atrae a miles de visitantes que desean descubrir las maravillas escondidas de España.
¿Por qué visitar Fermoselle?
Fermoselle es una villa de aspecto medieval que siempre ha dejado maravillados nacionales y extranjeros. Lo primero que destaca es su paisaje natural y el punto exacto donde se encuentra ubicada. En concreto en medio del Río Duero y el Río Tormes.
Esto quiere decir que está en el Parque Natural de Arribes del Duero, incluso se le considera su cabecera. Por lo que Fermoselle ha ganado el nombre popular del Balcón del Duero y desde hace algunos años, reconocido como Conjunto Histórico Artístico.
No solo es de los pueblos más bonitos de Zamora, sino que es uno de los más importantes de la provincia y que no puedes dejar de conocer.
Monumentos y sitios de interés
Si has llegado hasta aquí, quiere decir que te has fascinado al saber que en Fermoselle lo medieval está en todas partes. Y sí, al llegar lo primero que notarás son sus impresionantes laderas en las que verás casas colgadas medievales.
Parece que alguien las puso sobre el risco de forma mágica que a pesar de los años, conservan su aspecto original. Del mismo estilo que estas, pero más antigua, encontramos la Casa del Parque que originalmente fue el Convento de San Francisco construido en el siglo XII.
Después de estar años abandonado, se comenzaron los trabajos de restauración y ahora alberga el centro de información del parque. En sus galerías podrás ver vídeos sobre la vida silvestre de la región, aprender sobre su cultura, tradiciones, entre otros.
Después de conocer esta hermosa edificación, puede emprender un recorrido completo por el casco histórico de Fermoselle. Donde podrás disfrutar de un paseo medieval indescriptible. Comenzando por las calles de la Nogal, pasear por el Guapo o el Montón de Tierra.
Cuando estés en estas áreas debes estar atento, pues podrás encontrar la entrada a muchas de las bodegas de la localidad. De hecho, Fermoselle junto a su tradición vinícola, posee más de 1.000 bodegas que puede visitar y conocer.
En algunas de sus calles, también podrá notar la presencia de cruces, las cuales indican el camino que era usado en los Viacrucis. Dicho camino inicia en la Ermita de la Soledad hasta llegar al centro del pueblo.
Otros lugares de Fermoselle que debes conocer
La historia cuenta que Fermoselle era una fortaleza, por lo que entre sus calles podrá encontrar mucho de la época medieval. Por ejemplo, una de las puertas de la antigua muralla que ahora se conoce como el Arco de la Calle Requejo.
Aquí se encontraba exactamente la entrada y desde aquí se puede comenzar la caminata por la pendiente que lo llevará al siguiente lugar que debe conocer. Se trata de la Iglesia de Santa Colomba, uno de los puntos más altos.
En su interior se encuentra una talla con la figura de Cristo del Humilladero del siglo XI, una torre hermosa con un reloj que puede verse desde las afueras de Fermoselle. Otro templo importante es la Iglesia de la Asunción edificada en los siglos XII y XIII.
El edificio se caracteriza por basar su arquitectura en el románico, renacentista y gótico, y además, fue reconocida como Monumento Histórico Artístico. Si desea conocer más sobre las costumbres religiosas, en el área de la sacristía se encuentra el Museo Parroquial de Fermoselle.
Y ya que se encuentra en este punto en particular del pueblo, puede aprovechar de ver el Ayuntamiento, la Casa de los Arcos y la Plaza Mayor. Lugares emblemáticos y que dan lugar a las festividades más importantes de la localidad como los famosos encierros.
Casi para finalizar el recorrido, es momento de dejar atrás el pueblo para subir hasta el Mirador del Castillo. Antiguamente, era la ubicación del castillo de Doña Urraca, pero ahora solo quedan restos de este y de su torre.
La vista aquí es una maravilla, pero no es el único mirador que puedes visitar. Así que si deseas ver más allá del horizonte y disfrutar de un paisaje de ensueño, debes subir hasta el Mirador del Terraplén, Mirador de Las Peñas oel Mirador de El Torojón.
Aunque te recomendamos el Mirador de las Barrancas donde también podrás conocer la Ermita de Ntra. Sra. del Castillo. Ambos lugares se encuentran realmente a 25 km de Fermoselle, pero es de los lugares más hermosos desde donde podrás ver toda la inmensidad del Río Duero.
Gastronomía y fiestas en Fermoselle
Fermoselle tiene tanta riqueza gastronómica que el turismo enológico es uno de sus más grandes atractivos. Su tradicional producción de vino tiene más de 500 años y como complemento, ofrece a sus visitantes una amplia gama de recetas autóctonas realmente deliciosas.
Comenzando con la ternera sayaguesa, los chorizos, las patatas con bacalao y su afamado asado de carne. De hecho, el asado forma parte importante en sus fiestas patronales en honor a San Agustín la segunda quincena de agosto.
En Fermoselle también se celebra el lunes de Pentecostés, La Virgen de la Bandera y Santa Cruz. Así como las romerías y los tradicionales encierros que inician en las afueras del pueblo hasta llegar a la Plaza Mayor.