En un viaje por la provincia de Zamora, resulta imprescindible hacer una parada en Benavente, un encantador municipio que cuenta con un interesante patrimonio histórico-artístico, así como con una exquisita gastronomía y atractivas tradiciones, que le convierten en una parada más que obligada.
A continuación, te invitamos a conocer qué ver y qué hacer en Benavente, un fantástico destino para descubrir en tierras zamoranas.
Benavente-Pueblos bonitos de Zamora. Foto por Deositphotos.
¿Por qué visitar Benavente?
El pueblo de Benavente se encuentra ubicado al norte de la provincia de Zamora, en la comarca de Benavente y Los Valles, específicamente en la confluencia de la Tierra de Campos y de los valles bañados por los ríos Esla, Tera y Órbigo, y guarda una estrecha relación con el rey Fernando II de León, quien repobló el territorio y le otorgó fueros a la localidad en 1167.
Por otro lado, su posición geográfica ha hecho de Benavente un importante cruce de caminos y un punto clave para los peregrinos que realizan el Camino de Santiago, pues allí confluyen el Camino del Sureste y el del Centro en la vía a Santiago de Compostela.
Entre los atractivos turísticos que tiene para ofrecer, este pueblo zamorano cuenta con bonitos espacios naturales, que incluyen jardines, parques y miradores para el disfrute del turista. Asimismo, ostenta un interesante patrimonio monumental, conformado por iglesias, plazas, palacios y un Parador Nacional que es, sin duda, su más grande atractivo.
Pero eso no es todo, pues la villa es también conocida por sus llamativas festividades, algunas de interés turístico regional, y por su exquisita gastronomía que involucra productos de excelente calidad, como los quesos, la miel y los vinos locales.
Sin duda alguna, sobran las razones para visitar Benavente, un pueblo de Zamora con encanto de sobra, donde el arte, la historia, la cultura y la buena comida están siempre garantizaos.
Monumentos y sitios de interés
De la lista de monumentos y sitios de interés turístico que comprende la villa, el más importante es el Parador Nacional que se encuentra ubicado en la Torre del Caracol, la cual formaba parte del antiguo Castillo del siglo XVI.
Sin embargo, existen otros edificios de gran trascendencia, como la Iglesia de Santa María del Azogue, de estilo románico, la Iglesia de San Juan del Mercado, de los siglos XII y XIII, y el Hospital de la Piedad, el cual se fundó con el propósito de servir de albergue a los peregrinos en su camino hacia Santiago de Compostela.
A estos lugares se suman la Casa de Solita, un impresionante palacete que refleja lo mejor de la arquitectura moderna de la ciudad, y la imprescindible Plaza Mayor, en cuyos alrededores se puede disfrutar de la mejor gastronomía local, en alguno de sus bares o restaurantes.
Otros lugares de Benavente que debes conocer
Más allá de los monumentos y sitios de interés que antes mencionamos, conviene hacer una visita al Mirador de la Mota, un espectacular conjunto de parques y jardines urbanos que incluye la Mota Vieja, la Mota Alta y los Jardines de La Rosaleda.
Asimismo, merece la pena acercarse hasta el Parque de la Pradera, un amplio paraje natural con merendero incluido, donde también tienen lugar las piscinas municipales que puedes visitar durante todo el año.
Por último, si te queda tiempo, te recomendamos emprender el viaje hacia León y Zamora capital, ya que Benavente se encuentra a medio camino.
Gastronomía y festividades en el pueblo de Benavente
El pueblo de Benavente cuenta con una intensa actividad cultural, representada por numerosas fiestas y eventos que tienen lugar a lo largo del año. De especial mención son las Fiestas de la Veguilla, declaradas de interés turístico regional y celebradas en honor a la Virgen de la Vega ocho días después del Domingo de Resurrección, y las Fiestas del toro enmaromado, un excepcional festejo taurino que también ha sido declarado de interés turístico regional y que tiene lugar el día antes del Corpus.
Por otro lado, en lo que respecta a la cocina tradicional, ésta se basa en el uso de productos locales y de excelente calidad, tales como los pimientos, los embutidos, los quesos y la miel.
De los platos típicos, se lucen sobre la mesa manjares como el lechazo, las truchas del Tera y el bacalao a la cazuela, mientras que de la repostería, figuran dulces como los feos, las rosquillas de trancalapuerta, los bollos de coscarón, las bombas y la tarta de la Veguilla.
Por supuesto, no hay que olvidar los exquisitos licores de origen local, principalmente los vinos, cuya calidad les ha valido reconocimiento internacional.
La verdad es que Benavente es uno de esos pueblos con encanto que no puedes dejar de visitar en un viaje por Zamora, pues tiene todo lo necesario para ofrecerte una grata experiencia, incluyendo historia, cultura y lo mejor de la buena mesa.