La Comunidad de Castilla y León, y especialmente la Provincia española de Palencia se convierte en un lugar que guarda secretos y joyas arquitectónicas, es así que visitaremos Frómista, hermoso poblado que arranca su historia más atrás de la Edad Media, y la trae hasta nuestros días convertida en obras maestras.
No sorprende que esta villa de Tierra de Campos se debata entre la prosperidad y decadencia, verdades y leyendas, y al mismo tiempo sea paso obligado para los peregrinos que hacen el Camino de Santiago.
FRÓMISTA-Pueblos más bonitos de Palencia. Foto por ceparedonda en Pixabay.
¿Por qué visitar Frómista?
Es imperdible visitar este fantástico destino palentino, para comprobar de primera mano la belleza de sus monumentales edificaciones medievales, su relación con el desarrollo de la historia que se debate entre reyes, nobles y comunes, sus tradiciones y recetas culinarias, y percatarnos que el tiempo quedó detenido en este pueblo.
Monumentos y sitios de interés
Cuando entramos a Frómista, iremos directo a visitar la joya, el monumento por excelencia, la Iglesia de San Martín de Tours, hermosa obra ubicada en la Plaza de su mismo nombre, que parece sacada de un libro de cuentos.
Este templo, declarado Monumento Nacional, al que algunos llaman la “diosa de las iglesias románicas” fue erigido a finales del siglo XI, luego reconstruido, ampliado, reducido, hasta que finalmente logró este espléndido aspecto hoy en día.
Todo es perfecto en esta Iglesia, desde su arquitectura hasta su interior profusamente decorado, se nota que sus constructores eran sumamente detallistas.
En el frente resaltan las dos Torres circulares, y la firmeza de sus paredes; el color que reflejan sus muros bajo el sol, nos dejarán sin aliento dependiendo de la época del año, y lo más hermoso es que es parada, casi obligada, para los visitantes y peregrinos que se detienen a contemplar su esplendor.
En las adyacencias, por la Calle el Milagro de Frómista, un pueblo de Palencia, encontraremos la Piedra del Milagro, sobre la cual existe una interesante leyenda.
Caminamos hacia el norte, por la Calle Arquitecto Aníbal, y llegaremos a la Iglesia de San Pedro, con una fachada muy sencilla pero hermosa. En su interior se encuentra un órgano que data de finales de 1700.
También existe una especie de Museo Parroquial, donde podremos detallar el retablo de Nuestra Señora del Castillo, la reliquia de San Telmo y otros objetos litúrgicos.
Frente a esta Iglesia se encuentra la Plaza de Tuy, y en la misma veremos la Estatua de San Telmo, Patrono de esta villa.
Otros lugares de Frómista que debes conocer
Todavía quedan edificaciones fabulosas por recorrer, así que partimos hacia la Calle La Plata, para encontrarnos con la Iglesia de Santa María del Castillo, levantada sobre las ruinas de otro antiguo castillo.
En su interior encontramos el Museo Vestigia-Leyenda del Camino, en el cual se describen los orígenes, leyendas e historias de Frómista.
No menos importante es la Ermita del Otero, ubicada en las afueras del poblado en el Camino del Calvario. En este lugar, se resguarda la imagen de Nuestra Señora de Otero, Patrona del poblado, hermosa pieza del siglo XIII.
Además de estas grandes obras de arte, en Frómista se encuentra una obra de ingeniería hidráulica de gran envergadura, y estas son las esclusas cuádruples ubicadas en el Canal de Castilla por la Calle Las Huesas.
Su objetivo era servir de vía de comunicación y transporte, salvando los relieves del terreno, de las cuales son visitables cuatro de ellas en este lugar.
En los márgenes del Canal, se ha formado una interesante flora y fauna, con lugares de nidificación y de descanso para las aves migratorias, por lo cual es una delicia poder caminar o montar la bici en el sector.
Mapa con los lugares que visitar en Frómista
Fiestas y Gastronomía en Frómista
Este tranquilo pueblo tiene varias festividades a lo largo del año, pero las más especiales son las fiestas Patronales de San Telmo, que se celebran el lunes siguiente al lunes de Pascua y dónde los participantes de la procesión de “el Ole”cantan mientras se dirigen a la casa, donde dicen, que nació San Telmo.
Al domingo siguiente, el San Telmillo es el evento dedicado a los niños y jóvenes.
El 8 de septiembre se celebra a la Virgen de Otero, Patrona del lugar, con una romería conocida como “las merendillas”
Después de tanto caminar y disfrutar de esta brillante villa, debemos poner pies debajo de la mesa, y qué mejor que probar la comida palentina, donde su plato estrella es el lechazo, la sopa de ajo, el queso de oveja y los productos derivados del cerdo.
Si quieres alegrarte un poquito, prueba la esparceta, bebida espirituosa exclusiva de esta localidad y preparada por una familia que no divulga el secreto de este licor.
Me ha gustado acompañarte en este viaje por Frómista. Hemos aprendido sobre las leyendas que se tejen en torno al pueblo, hemos visto la belleza de sus obras arquitectónicas religiosas.
Descansar en sus plazas, y probar su gastronomía, nos ayuda a planificarnos y regresar cuando empiecen sus fiestas patronales, mientras hacemos el Camino de Santiago.