En la Comunidad Foral de Navarra y particularmente, a 47 kilómetros de la capital Pamplona, se encuentra un pueblo absolutamente especial; hablamos de Roncesvalles, una tierra plena de historia y muchas leyendas.
Su conjunto religioso es de gran valor arquitectónico, y desde hace centurias es paso obligado para los que hacen el Camino de Santiago de Francia hacia España; además se cuenta, que el mismísimo Carlomagno puso sus pies en estas tierras, y fue derrotado.
RONCESVALLES-Pueblos más bonitos de Navarra. Foto por Marianne Casamance.Wikimedia Commons.
¿Por qué visitar Roncesvalles?
Resulta impactante imaginar la cantidad de edificios medievales que se esconden en esta pequeñísima villa, tan auténtica y original como era hace muchos siglos atrás.
Se le considera una localidad sumamente importante para los peregrinos, casi a la par de la propia Compostela.
Los verdes valles del Pirineo se convierten en el balcón natural, haciendo de éste un espacio con mucho atractivo y un lugar de gran misticismo.
Monumentos y sitios de interés
El caserío de Roncesvalles cuenta con casi 20 habitantes, quienes son los custodios eternos de esta belleza de lugar, mientras recorremos las 4 calles que le cruzan y nos embriaga el ambiente antiguo que aquí se respira.
Empezamos la visita conociendo la Real Colegiata de Santa María, que incluye Iglesia, Capilla, Claustro, Museo y Biblioteca; este es el Conjunto Monumental más visitado.
La Iglesia fue edificada a comienzos del Siglo XII, por el Rey navarro Sancho VII El Fuerte, quien escogió este lugar para ser enterrado allí. El templo da la impresión de ser inmenso, y es precioso en su interior. Allí se resguarda la imagen de la Virgen revestida en plata.
Los vitrales permiten el paso de la luz fundiéndose con los colores del vidrio.
En el Claustro, los hermosos pasillos llevan a un patio central, luciendo una antigua pila bautismal del Siglo XIII. Allí vemos la Capilla de San Agustín, uno de los espacios más sobrios, donde está el sepulcro de Sancho VII El Fuerte, con la imagen yacente del Rey.
Junto a la Casa Prioral está el Museo, donde se exhiben piezas tan valiosas como el Ajedrez de Carlomagno, un relicario del Siglo XIV.
También se encuentra la Esmeralda de Miramamolin , pieza que junto a las “cadenas”, le arrebató Sancho El Fuerte a Muhámmad an-Nasir.
Dentro de la colección se puede apreciar el Códice La Pretiosa, manuscrito del Siglo XIII, que contiene el ceremonial y rituales de la liturgia de la época.
A un costado de todo el conjunto se halla la Capilla del Espíritu Santo o Silo de Carlomagno, que data del Siglo XII, y es la edificación más antigua de todo el complejo. Allí se oficiaban las misas a los difuntos durante el peregrinaje, y luego sus restos se depositaban bajo la Capilla.
Otros lugares de Roncesvalles que debes conocer
Todavía nos continúa sorprendiendo Roncesvalles, el fascinante pueblo de Navarra, con sus obras en antigua piedra. Nos paramos frente a la Capilla de Santiago o de Los Peregrinos, que aunque es pequeña, invita a la reflexión.
Y del viejo hospital de Peregrinos no queda nada, y el que se encuentra en la actualidad, está completamente remodelado desde el Siglo XVII, funcionando ahora como hospedaje para los caminantes.
A medio camino, entre la Colegiata y el Silo de Carlomagno, encontramos el Monumento a Roldán, original del italiano Mario Bassi de Vergiate, quien en el año 2010 donó esta escultura al poblado, para recordar la Batalla de Roncesvalles, con la muerte de este Caballero.
La gesta quedó luego en la memoria, con la obra literaria “El cantar de Roldán”.
Igualmente, los amantes de la naturaleza tienen su espacio vital en este lugar, por las diversas rutas de senderismo que ofrecen el Valle de Arce y el Alto de Ibañeta, donde los caminos de esta zona montañosa se llenan de colores y olores.
Por otro lado, el bosque de Basajaunberro está lleno de leyendas, ya que se dice que, aquí en el pasado hubo actos de brujería y las hechiceras armaban su aquelarre.
Gastronomía y Fiestas en Roncesvalles
El campo nos da las mejores hortalizas para preparar los mas exquisitos platillos, especialmente las migas de pastor, o las deliciosas truchas con jamón. Un imperdible es el revuelto de perretxikos o el guiso de jabalí. La cuajada es el postre típico de la zona.
En su fiesta más significativa, los habitantes y vecinos cercanos, así como turistas, se acercan el 8 de septiembre para honrar a la Virgen de Roncesvalles, Patrona de la localidad.
Descubrir el maravilloso poblado de Roncesvalles, con sus miles de peregrinos, haciendo el camino movidos por la mayor fe y devoción, que demuestran cuando llegan a los albergues, cansados, extenuados y algunos hasta con llagas en los pies, nos mueve el alma.
No obstante, nos encontramos ante un paraíso perdido y paralizado en el tiempo, donde todos nos dan la bienvenida, e incluso, cuando preparamos la mochila, nos dicen con la sonrisa en la cara “…buen camino…!!!”.