En esta oportunidad, el relax y el descanso, así como el paseo, sin prisa, por un poblado encantador, nos lleva a Altafulla, espacio ideal de Tarragona, para combinar playa y cultura.
Su ubicación en la Costa Dorada de Cataluña, frente al mar Mediterráneo, lo hace francamente inolvidable. Así como descubrir su pasado medieval cuando dejan tinajas en los techos de las casas para que las brujas no entren a cocinar sus pócimas.
ALTAFULLA-Pueblos de Tarragona. Foto por Enerok01. Wikimedia Commons.
¿Por qué visitar Altafulla?
Este hermoso lugar te propone salir a reconfortarte con la vida, descansar del ajetreo, ver el mar con los oídos, subir y bajar sus empinadas calles, visitar y recorrer su casco antiguo, y sobre todo, quedarte a orilla de playa a dejar volar la imaginación, crees que es mucho? Yo creo que es poco.
Anímate, vamos a recorrer juntos Altafulla, un simpático pueblo de Tarragona, muy relajante y con mucho que ofrecer.
Monumentos y sitios de interés
Empezaremos por conocer la Vila Closa o “Villa Cerrada”, lugar emblemático por ser el recinto amurallado, donde se alza el Castillo de los Montserrat, el cual se mantiene en perfecto estado, tal como se vería en el Siglo XVII. Desafortunadamente no se puede visitar, por ser una residencia privada.
Detrás de él se encuentra la Iglesia de Sant Martí, construida por el año 1700, y considerada bien cultural de interés local. Es de estilo muy sencillo, y cabe destacar que en el interior se encuentra el sepulcro de los Marqueses de Tamarit, de apellido Montserrat.
Muy cerca se ubica la Casa de la Mare de Deu, conocida como Casa de la Virgen.
Seguimos callejeando, en algunos momentos debemos subir y bajar largas escalinatas que comunican las callejuelas de este trazado medieval, hasta encontrar algunos restos de la antigua muralla.
Allí conseguimos una hermosa villa construida cerca de 1792, la Casa Robert, en clásico estilo barroco; en su fachada se encuentra la imagen de San José.
Otro lugar digno de conocer es la Plaza del Pou, donde por un costado se encuentra el edificio del Ayuntamiento, que data del Siglo XIX. A su lado veremos el monumento en honor a Antoni de Martí i Franqués, hijo ilustre de esta ciudad.
En otro extremo se encuentra el monumento denominado Castells o Monumento a la Torre Humana.
Ya en la zona extramuros, debemos visitar la Villa romana dels Munts, declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, y ya veremos por qué.
Esta villa fue construida en el Siglo I, y da una idea bastante clara de la opulencia y refinamiento en la que vivían sus ocupantes, ya que en diversas excavaciones se han encontrado estatuas, mosaicos y algunas columnas de mármol, de una belleza excepcional.
Otros lugares de Altafulla que debes conocer
Terminamos, parcialmente, el recorrido histórico por Altafulla conociendo el Castillo de Tamarit, preciosa estructura del siglo XI, y está situado en un promontorio a orillas del Mar Mediterráneo, por lo cual su perspectiva es alucinante; anexo tiene una pequeña iglesia abierta al culto.
Ahora iremos a refrescarnos a la playa y para ello pasearemos por la Carrer Botigues de Mar, auténtico paseo marítimo, donde encontraremos al mar a un costado y frente a él una larga hilera de casas blancas que funcionaban como almacén de los pescadores del siglo XVIII, ahora convertidos en tiendas y restaurantes, y algunas viviendas.
El mayor atractivo natural de este lugar son las playas, por lo que contamos con varios espacios: la playa Altafulla con su kilómetro de largo, es de la más visitada por su arena dorada y sus aguas cristalinas.
También tenemos la posibilidad de acudir a Cala Canyadell, ubicada cerca de los restos arqueológicos Dels Munts. Es una playa pequeña, de aguas serenas, ideal para tomar el sol o practicar snorkel.
Igualmente, nos acercamos a Playa Tamarit, ubicada a los pies del Castillo homónimo, con algo más de 1 kilómetro de longitud, y arenas finas y doradas, ideal para largas y lentas caminatas. Y si nos ha quedado más ganas de playa tenemos muy cerquita un gran abanico para poder disfrutar de más Playas de Tarragona.
Mapa con los lugares que visitar en Altafulla
Festividades y Gastronomía en Altafulla
Al ser un hermoso pueblo marino, con antecedentes medievales, descubrir su comida es una delicia. Los “calcots” a la parrilla son el plato típico que debemos probar en temporada, así como el pescado azul y los mariscos, las sardinas asadas, y los guisos de caracoles, todos acompañados con el excelente arroz.
Al ser un destino turístico, las fiestas de Altafulla son muy alegres. Y es así que destacan en el mes de junio la noche de brujas, para el mes de julio se dan las Fiestas de la Virgen del Carmen, mientras que en noviembre se celebra la Fiesta Mayor, con su exhibición de “castellers”.
El poblado de Altafulla, con su hermosa puesta de cara al mar, sus dos impresionantes Castillos, un centro histórico con edificaciones dignas de los nobles, pero donde todavía se respira el ambiente de un pequeño pueblito. Este lugar nos ofrece cultura, historia, naturaleza, pero sobre todo mucha paz y tranquilidad que lo convierte en el perfecto refugio de la vida contemplativa.